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BRACH MADRID DE PHILIPPE STARCK

24/02/2025

Madrid ha dado la bienvenida a Brach Madrid, el segundo destino de Evok Collection fuera de Francia y que ha sido diseñado por Philippe Starck. Con 57 habitaciones, incluidas 4 suites, un restaurante, un bar, una pastelería y un spa de 400 metros cuadrados, ofrece un espacio único que captura la esencia de Madrid y brinda una experiencia acogedora y sofisticada. Ubicado en un edificio de siete plantas construido entre 1919 y 1922 por el arquitecto Jerónimo Pedro Mathet Rodríguez, Brach Madrid se erige con una elegante fachada de piedra blanca en el corazón de la Gran Vía. A través de este complejo, la cadena francesa no solo ha conseguido reflejar la herencia cultural española, sino también la esencia francesa que lo distingue. Su ubicación histórica, sobre el antiguo Palacio de Masserano, donde vivió Victor Hugo de niño, añade un componente emotivo y cultural, con objetos únicos y detalles que cuentan historias del pasado.

Además, diseñado por Philippe Starck, el hotel fusiona modernidad y nostalgia, con espacios poéticos y materiales significativos que narran una historia de amor perdido y belleza evocada a través del diseño. En palabras del propio hotel, “en pleno centro de la ciudad, Brach Madrid es como sus huéspedes: único, magnético, romántico, artístico, ideal para una escapada urbana, una escapada familiar o un fin de semana romántico… La decoración de las habitaciones y suites te transporta a un viaje romántico, a una sensación de intimidad muy emotiva, mientras que la carpintería, el cuero, la cerámica y el mimbre otorgan a las habitaciones la suavidad y la calidez del sol”.

Pero sin duda es el restaurante uno de los espacios más aplaudidos. Al entrar en él, puedes imaginar a Salvador Dalí, Luis Buñuel y Federico García Lorca sentados dispuestos a arreglar el mundo como poetas. Philippe Starck ha recreado el ambiente de los grandes cafés, meca de la libertad intelectual y artística. Expuestos en un revoltijo, cuadros de estilos eclécticos y una colección de bellos objetos nos ofrecen la ilusión de entrar en un lugar que pertenece al pasado, dotado de una «memoria poética». La cocina abierta del restaurante lleva a la mesa toda la energía de la soleada cocina del chef Adam Bentalha.