20/05/2024
Con las lámparas de cerámica “Flaming Stars”, la artista Natascha Madeiski se apropia de objetos existentes para crear algo completamente nuevo. La diseñadora multidisciplinar con sede en Londres toma prestados objetos cotidianos de bajo valor (como materiales sobrantes y prototipos antiguos) y los modifica, combinándolos para crear nuevas esculturas dque se convierten en luminarias individuales. Hablando de su proceso, Natascha explica que busca “innovación a través de la experimentación con los materiales, su manipulación y los procesos que implican trabajar en la delgada línea entre objetos experimentales y funcionales”.
En este proceso se utilizaron varios objetos muy mundanos, incluido un globo para modelar, un embudo de plástico, materiales cortados e incluso algo de pan casero. Todos conforman un archivo de piezas disponibles que inicialmente se ensamblaron espontáneamente en divertidos collages cerámicos.
“A menudo le damos muy poco valor a un globo, a un recorte desechado, a cosas que guardamos en nuestros cajones. Pensándolo bien, a menudo se trata de objetos que relacionamos con momentos específicos y, por lo tanto, se conservan para preservar estos recuerdos”, explica Natascha. “Durante la pandemia todos hemos estado más cerca de nuestros hogares y de nuestras pertenencias; Utilicé lo que ya había allí”. Las lámparas están fabricadas en cerámica mediante la técnica de fundición deslizante. Esta colección se ha configurado con siete personajes diferentes y ahora están disponibles en un colorido acabado esmaltado o plateado metálico.
La originalidad reside en la divertida mezcla de colores, formas y texturas, aunque todas las piezas acaban encontrando su lugar adecuado para convertirse en una lámpara de diseño con un engranaje perfecto.
