31/10/2022
Omotesando y Aoyama son dos barrios situados en pleno centro de Tokio que destacan por sus tiendas de lujo de arquitectura singular, siempre con un marcado carácter japonés y mirando al futuro.
La avenida Omotesando, que da nombre al barrio, es el eje vertebrador de ambas zonas. Esta gran avenida, cubierta de árboles zelkova a ambos lados, comienza en el santuario Meiji y cruza el popular barrio de Harajuku hasta alcanzar las calles del residencial barrio de Aoyama.
En dura pugna con la más conocida Ginza, las zonas de Omotesando y Aoyama te permitirán descubrir el lujo y el estilo japonés. Y aunque son muchos los edificios de arquitectura singular realizados por grandes nombres de la arquitectura japonesa e internacional, a continuación, destacamos tres lugares que no deberías perderte durante tu paseo por Omotesando y Aoyama.
Tokyu Plaza Omotesando Harajuku
La entrada a este popular centro comercial, situado en la intersección de la avenida Omotesando con la avenida Meiji, seguro que te llamará la atención.
Llena de espejos situados en ángulos diferentes, la entrada produce espectaculares imágenes caleidoscópicas. Por ello, no es raro que la entrada siempre esté muy frecuentada de gente. Tanto haciendo fotos en la base, como desde las escaleras mecánicas. De hecho, no sólo turistas sino japoneses suben las escaleras para hacer fotos de la entrada y las vuelven a bajar.
El edificio, que tiene 9 plantas, fue construido en 2012 por Hiroshi Nakamura. Pero la entrada no es lo único a destacar de su arquitectura: te recomendamos también subir a la terraza exterior, un pequeño oasis de naturaleza y luz natural en pleno centro de Tokio. Tómate un café y relájate en un ambiente único.
Cartier
Probablemente una de las tiendas más elegantes y con estilo de toda la zona, el edificio de Cartier fue diseñado por Jun Mitsui en 2005.
El edificio está dividido en dos espacios independientes con una pequeña plazuela entre ellos. El frontal tiene forma de diamante y está recubierto de cristal. Así, refleja la luz del sol y del cielo en cualquier momento del día, mimetizándose en el entorno.
El otro espacio independiente, cambia el cristal por listones verticales de caliza. Y destaca por tener ventanales estrechos.
Sunny Hills
Entre las callejuelas residenciales de Aoyama, un edificio te sorprenderá por encima del resto: la tienda Sunny Hills, especializada en la venta de un pequeño pastelito de piña típico de Taiwán.
La tienda de Sunny Hills sorprende por su espectacular exterior conformado por listones de madera y con forma de cesta de bambú. Para su construcción, se siguieron los preceptos de la arquitectura japonesa de madera y especialmente la técnica jigoku-gumi. Esta técnica combina piezas verticales y transversales de tal manera que deshacer el entramado es casi imposible.
Tanto el uso de la madera natural como los métodos tradicionales usados para la construcción de la tienda son característicos de su arquitecto, Kengo Kuma, quien la diseñó en 2013.
Nuestra recomendación: entra y disfruta de la arquitectura interior de la tienda. Pero también de un dulce típico taiwanés y una buena taza de té verde japonés, ¡bien merecido!
