07/04/2021
La fragancia de esta flor, símbolo de la Costa Azul, impregna dos de los productos estrella de la firma cosmética La Provençale Bio.
La Provençale Bio nace con la idea de desmontar tópicos asociados a la cosmética biológica como que es cara, ineficaz o que sus productos dejan una sensación poco agradable, ya sea por su olor, textura, etc. Esta marca ha sido concebida y producida por mujeres y hombres apasionados y comprometidos, cuya intención ha sido y es reescribir la historia de la cosmética ecológica, devolviéndole todo su esplendor para atraer a nuevos consumidores que quieran integrar el poder de naturaleza en el centro de sus vidas. La Provençale Bio cuenta con una gama de cuidados con certificación ecológica, que busca los más altos niveles de exigencia tanto en eficacia como sensorialidad, basándose en las virtudes de un aceite de oliva “bio” de máxima calidad.
La olivicultora provenzal, mucho más que un símbolo
Todos los productos de La Provençale Bio están elaborados a partir de un ingrediente natural de calidad excepcional con miles de virtudes: aceite de oliva bio, rico en polifenoles antioxidantes y con Denominación de Origen Protegida (D.O.P) la Provenza.
Este aceite es elaborado a partir de aceitunas recolectadas de manera artesanal por productores y artesanos locales, siguiendo los estándares de agricultura ecológica para conseguir el mejor aceite de oliva “bio” posible, preservando al máximo su riqueza en polifenoles y vitamina E antioxidantes.
Además, el logo de la casa se inspira en el grabado de una olivicultora provenzal de Charles Edward Perugini (1888). Esta obra recuerda que, desde siempre, la Provenza, una región que destaca por su arte a la hora de cultivar plantas y flores con beneficios sorprendentes.
Esencias florales
Crear aromas agradables a partir de ingredientes 100% naturales es una de las principales limitaciones requeridas por las especificaciones de certificación “bio”. Prueba de ello es que, mientras que la perfumería tradicional cuenta con alrededor de 6.000 materias primas a su disposición, la perfumería natural, solo tiene unas 400. Pero esta circunstancia no ha desalentado a los creadores de La Provençale Bio, que desde el principio tenían claro que querían aportar a sus productos fórmulas certificadas “bio” de una extremada sensorialidad, apostando por perfumes de excepción. Es por ello que han recurrido a los perfumistas de Grasse, reputados por sus increíbles fragancias realizadas a partir de materias primas de origen natural que florecen en la Provenza. Han sido los perfumistas de Mane, una casa familiar especializada en la extracción de plantas para perfumes desde 1871, quienes han imaginado fragancias deliciosas y adictivas para la firma: “oliva radiante”, “jazmín y mimosa” y “ramo de verano”.
Productos estrella con aroma de mimosa
La fragancia de esta flor amarilla transmite una sensación de bienestar y relax que impregna la “Crema de Juventud” y el “Aceite de Juventud” de La Provençale Bio. Gracias a su alto contenido en polifenoles extraídos del aceite de oliva “bio” D.O. Provenza y Vitamina E, esta crema es un verdadero concentrado de juventud para la piel. Su textura fundente, penetra rápidamente, sin dejar una sensación grasa, solo un sutil aroma de jazmín y mimosa. Esta crema aumenta la hidratación e inhibe la oxidación cutánea. Tras un uso habitual se aprecia cómo las arrugas y las líneas finas se difuminan y la piel recupera su firmeza y luminosidad. Se aconseja aplicar por la mañana sobre la cara y el cuello.
El Aceite de juventud, por su parte añade a los beneficios del aceite de oliva E tres aceites vegetales más: aceite de argán ecológico, rico en ácidos grasos insaturados para asegurar el mantenimiento de la función de barrera cutánea; el aceite de Jojoba ecológico de composición parecida a la grasa de la piel, para fortalecer la película hidrolipídica; y el apreciado aceite de camelina, muy rico en omega 3, ácidos grasos esenciales no sintetizados por el organismo, que permite contribuir a la flexibilidad de la piel. El resultado es un sérum ultra nutritivo que penetra inmediatamente sin dejar ninguna película grasa en la piel. Se aplica por la noche y proporciona un rostro radiante por la mañana.