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MEDITERRÁNEO EN ESTADO PURO

20/09/2024

Hemos encontrado el lugar perfecto para ver los mejores atardeceres del Mediterráneo y que así duela menos decirle adiós al verano. Se trata de Pòsit, el restaurante de playa más natural y relajante y de cuyo interiorismo se han encargado el estudio de interiorismo 05 Cristina Arnedo y la interiorista María Ángeles Díaz.

En el local, ubicado a orillas de la playa de La Pineda, en Tarragona, la naturaleza se cuela en este restaurante de manera sutil y elegante, gracias a un diseño interior que prioriza la utilización de materiales naturales y sostenibles, con formas orgánicas y curvas, colores arena y una iluminación muy cálida. Para ello, las interioristas han trabajado en la creación de un ambiente agradable, acogedor y natural, donde disfrutar de manera relajada de la cocina marinera tradicional de arroces y platos de pescado y marisco que ofrece El Pòsit.

El restaurante cuenta con una gran terraza ubicada a pie de playa y con un amplio espacio interior. Grandes ventanales conectan ambas zonas. En el interior, la luz se tamiza sin tapar las maravillosas vistas al mar gracias a unas cortinas de fibras naturales, tipo red. Cada elemento del interior ha sido diseñado para generar una atmósfera que permita al cliente disfrutar de una experiencia culinaria única, en un entorno privilegiado frente al Mediterráneo. El diseño a medida de distintos biombos realizados en cuerda, de formas curvas, contribuye a generar mayor sensación de privacidad entre las mesas, a la vez que divide los espacios sin bloquear la luz ni la vista al mar. 

Con la comodidad del cliente en el epicentro del proyecto, el restaurante se ha equipado con mobiliario de distintas tipologías -mesas redondas o rectangulares de distintos tamaños, sillas y también bancadas que aprovechan el espacio, etc.-, lo que permite acomodar tanto a grupos numerosos, como a otros más reducidos con el máximo confort. La paleta de materiales típicamente mediterráneos como el barro, la madera, el mimbre y las plantas autóctonas subraya la proximidad de la playa, que casi se puede tocar desde el propio restaurante.