18/08/2021
La Parrilla de Arganda adapta su menú a la llegada de la época estival dando protagonismo a las verduras de temporada cultivadas en su propia huerta.
El sureste de la Comunidad de Madrid da la bienvenida a La Parrilla de Arganda, un restaurante caracterizado por una decoración moderna y suave con toques tradicionales. Su espacio se divide en un tradicional bar, una amplia sala con capacidad para 300 personas y cuatro reservados que aseguran privacidad; espacios en los que la seguridad y las medidas de protección anti-Covid son a prioridad absoluta. Además, La Parrilla de Arganda cuenta con un amplio jardín interior en el que tienen lugar celebraciones y eventos con mucha versatilidad. “Cocina sencilla, de toda la vida y para todos es lo que queremos ofrecer a nuestros comensales”, afirma Roberto Fontán quien, previo a esta nueva aventura hostelera, construyó su trayectoria profesional en restaurantes tan icónicos de Madrid como Lardy o Porto Novo. A estas palabras se suman Paul García y Noemí Losada quienes añaden que el objetivo de La Parrilla de Arganda pasa, únicamente, porque los clientes “coman bien, en mayúsculas, gracias a una propuesta honesta y tradicional a un precio asequible”.
Del mar… a la parrilla
Para la elaboración de platos como los chipirones de anzuelo a la parrilla con cebolla caramelizada, el arroz marinero o el rodaballo salvaje a las brasas el equipo de cocina de La Parrilla de Arganda utiliza pescados traídos, diariamente, de los puertos gallegos de Vigo y de Laxe. Esta premisa de calidad se plasma también en las carnes. Los productos empleados para la preparación del rabo de toro estofado a la antigua, las chuletas de lechal a la plancha o el solomillo de vaca se obtienen de pequeñas explotaciones ganaderas del norte de León y de Galicia implicadas con la sostenibilidad y comprometidas con el cuidado de los animales.
Con huerta propia
Enclavada en la nombrada Huerta de Tajuña, en el término de Orusco de Tajuña, se encuentra la huerta de la que La Parrilla de Arganda obtiene la mayoría de sus verduras y hortalizas. De su propia huerta obtienen también los huevos de campo gracias a las 50 gallinas que se encuentran en este espacio. Estas viven en semilibertad y disfrutan de una alimentación totalmente natural que aporta a los huevos que se obtienen de ellas un sabor y color singulares. Los tomates, pepinos, pimientos, cebollas, calabacines, etc. de la huerta cobran especial protagonismo para la elaboración de ensaladas, destacando la de perdiz escabechada en frío. Destacan las verduras a la parrilla -con platos como la parrilla de verduras naturales a la brasa, los espárragos verdes a la parrilla de carbón y pimientos rojos de la huerta asados a la brasa con ventresca-, como alternativa para poder disfrutar de la especialidad de la casa que da nombre al restaurante. La Parrilla de Arganda ofrece también a sus clientes sugerencias del día fuera de carta como escabeches de pescados clásicos y mariscos a la parrilla.