09/07/2025
Hay trayectorias que escapan a las convenciones, y la de Rose Wylie (Hythe, 1934) es una de ellas. La artista británica, reconocida por su estilo libre, provocador y profundamente original, protagoniza ahora una gran retrospectiva en el Zentrum Paul Klee de Berna. La muestra, titulada Flick and Float, podrá visitarse hasta el 5 de octubre de 2025 e incluye más de cincuenta pinturas y alrededor de una docena de dibujos, con varias piezas creadas específicamente para esta exposición.
Wylie comenzó su formación artística en los años cincuenta en Folkestone y Dover School of Art, para más tarde continuar en Goldsmiths y el Royal College of Art de Londres. Sin embargo, interrumpió su carrera durante décadas para dedicarse a la crianza de sus hijos y al ámbito familiar. Fue a finales de los años noventa cuando volvió a pintar con intensidad, logrando una proyección internacional tardía pero contundente. Su primera gran exposición individual llegó en 2013 en la Tate Britain, a la que siguieron muestras en el CAC Málaga, el Aspen Art Museum, el Serpentine o el S.M.A.K. de Gante.
Las obras de Wylie se caracterizan por su gran formato, una paleta expresiva y un lenguaje pictórico que coquetea con el ‘bad painting’ y el pop subversivo. En ellas hay referencias al cine, a la cultura popular y a la vida cotidiana, siempre filtradas por una mirada sagaz, libre y cargada de humor. “Cuando pinto escenas de películas, trabajo desde la memoria… No vuelvo a verlas. Me interesa la emoción visual inicial”, afirma la artista.
El proceso de creación de Wylie también desafía las normas: sus dibujos preparatorios —en apariencia simples, casi infantiles— se convierten en puntos de partida para composiciones complejas. No corrige, sino que superpone papeles o fragmentos de lienzo, en un acto de “flotar” sobre la obra que ella misma reivindica. De ahí el segundo término del título de la exposición: Float.
El catálogo de la muestra incluye un A–Z donde la artista despliega su universo conceptual y visual, así como textos de Fabienne Eggelhöfer, comisaria de la muestra, y de Nina Zimmer, directora del Zentrum Paul Klee. Además, el museo ha previsto visitas guiadas, actividades familiares y una guía digital para explorar la obra de esta artista única, que sigue pintando con lucidez y energía a sus noventa años. Wylie lo sintetiza con una frase tan sencilla como reveladora: “Pinto cómo se ven las cosas y escribo cómo suenan”.