11/04/2025
Italia es un país donde la belleza está en cada detalle, y pocas formas de viajar permiten apreciarla como alojarse en hoteles que combinan historia, diseño y sostenibilidad. De la mano de The Aficionados, esta ruta por tres joyas del turismo boutique ofrece una forma distinta de descubrir el país: desde la autenticidad rural de Susafa, en Sicilia, pasando por el lujo monacal de Vocabolo Moscatelli, en Umbría, hasta la sofisticación artística de Locanda al Colle, en la Toscana. Tres destinos donde la arquitectura, la gastronomía y el paisaje crean experiencias memorables, siempre con el máximo respeto por la naturaleza y la tradición local.
En el corazón de Sicilia, Susafa es un refugio que ha sabido transformar una finca familiar en un hotel boutique de lujo sostenible. Con más de 150 años de historia, esta masía del siglo XIX ha sido restaurada respetando su arquitectura original, integrando piedra, madera y textiles naturales para conservar su esencia. Bajo la dirección de Manfredi Rizzuto, el hotel mantiene un compromiso con la sostenibilidad a través de su filosofía de kilómetro 0, ofreciendo una gastronomía basada en productos de la finca y en la colaboración con productores locales.
En el verde paisaje de Umbría, Vocabolo Moscatelli es la prueba de que el diseño contemporáneo puede integrarse con el pasado sin perder autenticidad. Este antiguo monasterio de 800 años, restaurado por el arquitecto Jacopo Venerosi Pesciolini, conserva su solemnidad original mientras incorpora elementos de diseño italiano de vanguardia. Los interiores combinan suelos de madera antiguos, ladrillos de terracota y materiales nobles como el latón y la piedra, creando un ambiente de refinada simplicidad. Cada una de sus 12 suites ha sido decorada con muebles de mediados de siglo, piezas de diseño de Paola Lenti y luminarias de Flos, estableciendo un delicado equilibrio entre lo histórico y lo contemporáneo. Rodeado de bosques y viñedos, este hotel boutique es un remanso de paz donde los huéspedes pueden disfrutar de jardines mediterráneos.
Por último, la ruta nos lleva a la Toscana, donde Locanda al Colle ofrece una visión diferente de la clásica casa rural italiana. Situado en una colina de Versilia, con vistas al mar Tirreno, este hotel de encanto rústico se distingue por su atmósfera relajada y su cuidada estética. Sus habitaciones, con techos de vigas de madera y suelos de piedra, están vestidas con linos de Rivolta Carmignani y equipadas con duchas de lluvia de Hans-Grohe, combinando el confort con la artesanía italiana. Pero si hay algo que define a Locanda al Colle es su enfoque en la experiencia gastronómica: cada noche, su chef Gian Luca elabora un menú de temporada que se sirve en la terraza iluminada por velas, donde los sabores de la cocina toscana cobran protagonismo con recetas como ravioli caseros, pulpo a la parrilla y pesto artesanal.