12/02/2024
Dicen que las cosas es mejor hacerlas solos que mal acompañados, y si es el caso, genial. Pero si tienes a alguien con quien te apetezca celebrar San Valentín porque sí, también está bien. Elijas la opción que elijas, la web especializada en viajes y alojamientos de lujo The Aficionados, proponen algunas opciones de lo más apetecibles.
Situado en el frondoso barrio de Príncipe Real, el Palácio Príncipe Real de Lisboa es de color rosa, data de 1877 y fue una lujosa residencia familiar que cortejaba a la alta sociedad lisboeta. Este antiguo palacio es hoy un hotel boutique con un estilo fabuloso: grandeza convenientemente relajada. A pesar de su tamaño, el Palácio Príncipe Real solo tiene 28 habitaciones y suites, lo que fue una decisión de diseño deliberada para mantener las habitaciones en sus grandes dimensiones originales.
En el bullicioso corazón del casco antiguo de Amberes, el Hotel Julien es un hermoso santuario urbano de estilo y reposo. Escondido detrás de unas altas puertas con brillo gris en una calle estrecha de Amberes, a pasos de la Catedral de Nuestra Señora, el hotel se mantiene alejado del ruido urbano. Una vez dentro, espacios tipo galería y patios frondosos que respiran sencillez y elegancia dan la bienvenida a los huéspedes.
Monsieur Didot es una maravillosa casa de huéspedes de diseño con seis suites situada en el corazón creativo de Atenas, en el barrio de Kolonaki, hogar de la comunidad creativa, librerías, editoriales, galerías, museos y cafés. Este pequeño edificio restaurado, de solo seis suites, está pintado en un tono melocotón y la carpintería de azul graupel, en contraste con la mampostería de piedra neoclásica. Construida en 1890, la mansión de dos pisos fomenta el diseño seductor de la cultura ateniense, lleno de detalles imaginativos, obras de arte y muebles a medida.
En Bolsano, custodiado por las Dolomitas, Parkhotel Mondschein relata una historia particular que se remonta hasta el siglo XIV y que ofrece una experiencia de sofisticación y descanso incomparable. Este edificio catalogado como patrimonio y remodelado a lo largo de los siglos, es el mantra del diseño de interiores que une de manera consumada los elementos históricos restaurados con la nostalgia, el estilo y la extravagancia del apogeo del cine y el diseño italiano de la década de 1960.
