31/01/2022
El 14 de febrero se puede celebrar o no, solo o acompañado, pero no deja de ser una excusa perfecta para querer… estar en cualquiera de estos tres hoteles que son el paradigma del lujo, cada uno en su estilo y su concepto. Que viva el amor, a uno mismo o a lo que sea, pero si hay que darlo o recibirlo, que sea en Manchester, Italia o la Riviera Maya.
Moxy Manchester City
Moxy Hotels, la marca de hoteles experienciales que forma parte del portfolio de Marriott Bonvoy, ha debutado oficialmente en Manchester con el lanzamiento de Moxy Manchester City. Situado en el dinámico barrio de Spinningfields, este moderno hotel es el destino perfecto para aprovechar al máximo el enérgico espíritu de Mánchester, rodeado de los restaurantes y bares de moda. Las 146 habitaciones se adaptan a las necesidades de cada huésped, con camas con canapé tapizado, un espacio de trabajo y cómodas butacas, televisores con Netflix, además de ser pet-friendly.
Sensira Resort & Spa
El Sensira Resort & Spa es un complejo hotelero situado en la Riviera Maya que personifica el lujo, la atención y el disfrute que ofrece esta zona del Caribe mexicano. Está situado en la Bahía de Petempich, en un área privilegiada muy próxima a Cancún, rodeado de las principales playas, parques, cenotes y atracciones turísticas. Sus impresionantes vistas a la selva tropical de la región y a las azules aguas del mar Caribe hacen que el viajero sienta una fuerte conexión con la naturaleza desde que pone un pie en el hotel. Como su propio nombre indica –proviene del término egipcio Chenzira, que significa ‘nacer al mismo tiempo que se vive un viaje–, busca hacer que los huéspedes creen un vínculo especial con el destino y el lugar. Para ello, cuenta con acogedoras habitaciones y suites, para viajar solo, en pareja, con familia o amigos, completamente equipadas con todo tipo de amenities.
Hotel Icaro
En las estribaciones de las montañas Dolomitas, Italia, y enclavado dentro de una red de pistas de esquí y senderos para caminatas, se encuentra el renovado hotel Icaro. Sus humildes orígenes se remontan a un simple albergue de montaña de la década de 1930. Está en las pistas y senderos de la estación de esquí Seiser Alm y rodeado por los Dolomitas y ofrece restaurante, piscina cubierta y vistas a la montaña. Sus habitaciones son luminosas y cuentan con un balcón con vistas panorámicas de los Dolomitas, además de spa con una sauna tradicional del Tirol del Sur, un jacuzzi al aire libre.
